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		Confidencialidad AnuladaFTAA.sme/w/81/Rev.1
 18 de febrero de 2004
 Original: español 
		
      ALCA - GRUPO CONSULTIVO SOBRE ECONOMIAS MAS PEQUEÑAS
 VENEZUELA
 
 
 PROPUESTA
 
    Durante el CNC de Puebla realizado entre el 8 y 11 de abril Venezuela presentó un documento en el que se insiste en 
    la necesidad de discutir la viabilidad y conveniencia de incluir como tema el de los Fondos Compensatorios con el 
    objetivo de reducir de manera significativa las asimetrías en los niveles de desarrollo entre naciones y entre 
    sectores productivos involucrados, de alguna manera, en las negociaciones del ALCA. Asignándole a dicho mecanismo 
    metas sociales y económicas precisas, plazos bien establecidos y mecanismos de seguimiento. Esta propuesta ha seguido 
    avanzando, en estos momentos se encuentra enfocada hacia un Fondo para el Fomento de la Producción, como requisito 
    indispensable para disminuir las asimetrías entre las economías participantes mediante la competitividad en un área 
    de libre comercio.
    
    Este mecanismo requiere de una definición inicial que permita medir las asimetrías existentes en la región y encuentra 
	el foro de debate en el Grupo Consultivo de Economías más Pequeñas (GCEMP). En este grupo no ha sido alcanzado ningún 
	consenso el cual permita dar inicio a la discusión sobre las asimetrías en el grado de desarrollo de los países, es por 
	ello que Venezuela propone el inicio del debate partiendo de la base que el identificar una definición concreta de 
	economía más pequeña facilitará la concreción de una o varias estrategias para lograr superar los obstáculos generados 
	con las asimetrías existentes. Es por ello que se ha identificado un grupo de variables económicas y sociales que 
	buscan distinguir de forma no discrecional las economías que requieren ser asistidas para lograr competir en condiciones 
	favorables para los países en el área de libre comercio.
 
Venezuela considera que el carácter abarcador  de los contenidos del ALCA, en cuanto a tratados comerciales y a la 
legislaciones nacionales, así como el gran peso de las relaciones económicas hemisféricas en el funcionamiento de la mayoría 
de las economías involucradas, tanto en lo comercial como en el movimiento de capitales exige de considerar indicadores que 
permitan presentar las mencionadas asimetrías. 
 
De esta forma, el tratamiento en el ALCA de las diferencias en los niveles de desarrollo y el tamaño de las economías 
participantes, además de plantearse –por las razones arriba expuestas– como un asunto de la mayor prioridad, debería incluir:
 
 
La generación de instrumentos dentro del ALCA, a través de los cuales se busque no sólo que los países “en desarrollo” 
puedan acceder al Área, sino que además y principalmente esos países puedan mejorar sus condiciones productivas y 
competitivas, atenuándose las disparidades que caracterizan a su funcionamiento económico interno y las grandes distancias que 
los separan de las grandes economías desarrolladas del Hemisferio.
 Una definición clara respecto a las economías que serán objeto de trato especial y diferenciado. Hasta la fecha, en las 
negociaciones del ALCA si bien se hace referencia reiteradamente a las diferencias en “los niveles de desarrollo y el tamaño”, 
el concepto que se utiliza para identificar a los destinatarios de dicho trato es el de “Economías más pequeñas”, el cual remite 
a la dimensión económica de los participantes, sin que estén definidos los criterios que se utilizarán al respecto. En sentido 
estricto, dicha dimensión –y el acceso o no al trato especial y diferenciado– estaría determinada por variables tales como 
población, superficie, producción global y dotación de recursos, pero debería incluir además otros indicadores más referidos 
al grado de desarrollo y a limitaciones estructurales de las economías: composición de las exportaciones y vulnerabilidad 
externa; nivel de desarrollo industrial; ingreso per capita promedio y variaciones respecto a ese promedio; pobreza y pobreza 
extrema, etc.
En tal sentido, el acceso de un país al trato especial y diferenciado podría darse en función de la calificación que este país 
obtenga en dos tipos de indicadores: por una parte la vulnerabilidad externa, medida a través de la ponderación de tres factores, 
a saber: la diversificación exportadora, medida esta como el grado de participación de 5 productos principales en el total de 
exportaciones; el grado de concentración en el destino geográfico de las exportaciones; y por último, el grado de dependencia 
en exportación de productos primarios; y por otra parte un segundo tipo de indicadores que estarían referidos a la pobreza de 
oportunidades, definida a través de la ponderación del PIB per capita, el Índice de Desarrollo Humano, los índices de pobreza 
y los niveles de desigualdad del ingreso expresado a través del coeficiente de GINI.
 Una identificación de trato especial y diferenciado no sólo hacia la totalidad de cada una de las economías, sino también 
hacia el interior de cada una de ellas, de tal manera que dicho trato pueda dirigirse a las regiones y sectores que más lo 
necesitan. De esa manera los recursos que se canalicen para atender a las disparidades se vincularían directamente con los 
ámbitos intra-nacionales a los que irían dirigidos, asegurando de esta forma mayores niveles de eficiencia y transparencia, 
así como una reducción de las trabas administrativas asociadas al uso de dichos recursos provenientes de los mencionados 
mecanismos. |